The happening

Me gustan los comienzos,  no poseo muchos de esos ya que nunca permito una ilusión o acercamiento, pero de alguna manera respondí ese mensaje y obviamente después que pasara mi prueba de mi pequeña introducción al caos empezamos hablar por un muy corto periodo hasta que dejé de responder, podré ser muchas cosas pero menos infiel, recuerdo su felicitación por mi cumpleaños que cuadraba exactamente con mi rompimiento y empezamos hablar de nuevo,  no es sencillo que te empiece a gustar a alguien cuando estás viviendo muy lejos de el,  no pienso mencionar absolutamente nada sobre él en esta entrada,  hablar mal de él sería hablar de mi,  de una parte de mi de un pilar que podría derrumbarse si lo hago, como olvidar cuando me dijo que le gustaba...  Ese día escapé de clases me embriague con vino y tuve un parisino recorrido en bicicleta hasta estrellarme afuera del trabajo cantando blind melon,  pero claro el jamás podría enterarse de eso,  no podía mostrar ningún signo de debilidad,  el problema nunca fue si el fuera o no una buena persona,  el problema era que yo no lo era, no en ese momento,  y eso es lo que realmente apesta del cáncer puede llevarse como un préstamo indeterminado lo mejor de ti.
El 13 de julio era la fecha de mi regreso, un día antes de su cumpleaños,  pero a una semana entré en pánico yo no era lo que el esperaba al menos es ese entonces fingía no serlo y corte todo lazo, recuerdo lo impotente que me ponía cuando el me decía que tenia miedo,  que me gustaba y que debíamos estar juntos y por mucho que lo intenté pero algo mucho mas fuerte me arrastró hasta el hasta esa ciudad nefasta,  que ya tanto daño me había hecho,  escribo esto por que recién hoy vuelvo a estar completa y los recuerdos de alaska han vuelto a ser mis recuerdos,  recuerdo la primera vez que lo vi,  oh dios recuerdo lo nerviosa que estaba podía escuchar mis latidos con cada paso mientras nos acercábamos más y más hacia ese bar, recuerdo cuando vi sus pequeños ojos, sus ojos de enamorado que solo me miraban a mi,  no recuerdo que fue lo primero que él dijo o lo que yo hice estaba demasiado ocupada viendo sus manos y sus ojos sus manos entre mis manos, ni siquiera recuerdo en que momento Kat desapareció, o cuando terminamos bailando Call it fate Call it karma en el consultorio de su madre,  pero recuerdo sus labios sus tibios labios abrazando los míos,  se que todos conocen la historia de lo que sucedió después,  pero no es la verdadera,  siempre lo dije alaska podía ser lo peor de mi pero también guardaba lo mejor, y esa noche alaska no fue quien le dio mi sacacorchos y a Mordecool,  fui yo,  y tomo casi un año aceptarlo pero es mejor tarde que nunca,  aunque ahora sea muy tarde , ese 14 de julio inició todo y hoy empieza de nuevo
Día 7 : el comienzo.